v 1 - "Como no conviene la nieve en el verano, ni la lluvia en la siega, así no conviene al necio la honra"
4 -"Nunca respondas al necio de acuerdo con su necedad, para que no seas tú también como él" -
5 -"Responde al necio como merece su necedad para que no se estime sabio en su propia opinión"
11 - "Como el perro que vuelve a su vómito, así es el necio que repite su necedad"
20 - "Sin leña se apaga el fuego, y donde no hay chismoso, cesa la contienda"
El orgullo y la vanidad, hacen que las personas parezcan sabias en su propia opinión, y por lo tanto, altivamente confiadas en sus ideas. Sin embargo, la sabiduría y la verdad no se adquieren mediante el razonamiento humano, sino al aceptar lo que Dios ha dicho y revelado en todas las Escrituras. En sincero reconocimiento de la potencialidad para el engaño en el corazón de ellos, los creyentes no deben suponer que sus normas de lo bueno y lo malo son las normas de Dios.
Mas bien, Dios los llama a que humildemente sometan todos sus pensamientos a la obediencia a la autoridad de su revelación y del ministerio del Espíritu Santo, pidiéndole que los haga darse cuenta de su error y los corrija en las cuestiones en que estén equivocados. (11) Pedro aplicó este proverbio a los que una vez siguieron a Cristo, conocieron el camino de justicia, y luego se apartaron de Dios y de sus santos mandamientos para vivir otra vez en pecado.
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