sábado, 21 de junio de 2014

Espíritu Santo Consolador

Isaías 57:1-2

"Perece el justo, y no hay quien piense en ello; y los piadosos mueren, y no hay quien entienda que de delante de la aflicción es quitado el justo. Entrará en la paz; descansarán en sus lechos todos los que andan delante de Dios"



Quiero contarles cómo en el momento más difícil y doloroso de mi vida, el Señor me habló con estas palabras y realmente me consoló y me fortaleció, el Espíritu Santo cumpliendo con su misión en los hijos de Dios. 

Unos días antes del 20-6-2.009, hablando con el Señor le dije "Señor no te lleves nunca a mis hijos porque no voy a soportar el dolor", y el Señor me respondió con voz audible, "es mi hijo", y yo le respondí está bien Señor, es tu  hijo, pero yo pensé que sería cuando fuera viejito, hasta que una noche me avisan que le había dado un A.C.V. a mi hijo, tuvo un derrame invasivo; y toda la Iglesia orando, pero yo le dije al Señor ante tamaña noticia, "que se haga tu voluntad". En la fecha dada se fue a los brazos de Su Señor, porque él me había dicho unas horas antes que amaba a Dios con todo su corazón. 
Mi corazón fue partido en dos, pero mi Señor me sostenía, y me daba las fuerzas para sostener a mi hija y a mis nietas. Buscaba estar sola para poder descargar mi dolor, en ningún momento le pregunté al Señor ¿por qué?. Conocí la paz que sobrepasa todo entendimiento y que sólo Jesucristo te puede dar, le adoraba a mi Dios, aunque el dolor era tan fuerte, entendí que la Gracia de Dios en mí me fortalecía, derramaba mi corazón ante mi Señor, parecía que se me hacía añicos todo mi ser, y decía "yo sé que mi hijo está con vos, pero lo extraño tanto", fue en ese momento  cuando escucho la voz del Espíritu Santo que me da la Palabra de Isaías 57:1-2, y cuando lo leí con el rostro bañado en lágrimas,  recibí la consolación del Señor . Hoy se cumple 5 años de su encuentro con Su Señor en el cielo, no fue fácil para mí , pero cada día que pasa me acerca más para encontrarme con mi amado hijo.
Esto que escribí, no es un estudio teológico, sólo quiero que todos los que lean este blog confíen en Dios que nunca los va abandonar, en los peores momentos, los va a sostener con Su mano derecha  no los dejará solos. La condición, es que tu amor al Señor Dios, no mengue, sino que cada día crezca hasta alcanzar la plenitud de Cristo, y puedas decir "ya no vivo yo, mas Cristo vive en mí"  



No hay comentarios:

Publicar un comentario