Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo (4) según nos escogió en Él antes de la fundación del mundo, para que fuésemos santos y sin mancha delante de Él"
Hoy día, como los hubo siempre, existen líderes religiosos que emplean el lenguaje bíblico para engañar al pueblo de Dios y apartarlos de la sencilla adoración del Señor. Los falsos maestros saben como emplear el lenguaje bíblico para transmitir enseñanzas NO bíblicas. Los creyentes debemos escuchar cuidadosamente lo que se predica a fin de evaluar si los conceptos expresados son una debida exposición de la Palabra de Dios.
En los lugares celestiales: nos indica las esferas o ámbitos de nuestra asociación en Cristo. Todavía no estamos en el cielo. pero nuestro llamamiento es celestial; el poder de nuestro vivir diario es celestial; la provisión de Dios es celestial. Sólo en él podemos recibir estas bendiciones. Santiago 1:17 "Toda buena dádiva y todo don perfecto desciende de lo alto, del Padre de las luces"
Esto es la bendición de Dios sobre nosotros y por lo cual nosotros a nuestra vez bendecimos a Dios dando gracias, alabanza y adoración.
Generalmente nos olvidamos que "nos bendijo con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo". La gran bendición es poder estar en Su presencia, tener paz, gozo, amor, esto no se puede comprar, es la evidencia del Espíritu Santo morando en nosotros.
Me asombra, cuando veo cómo las iglesias cristianas de hoy predican sobre las bendiciones de Dios, y no sobre lo que Dios nos demanda para recibir las bendiciones : obediencia a Su Palabra, Santidad, fe en el Señor, perseverancia en correr la carrera que nos lleva al supremo llamamiento, que es en Cristo Jesús, el Evangelio de nuestro Señor Jesucristo es negarse a uno mismo, ya nos anticipo que en el mundo tendremos aflicción, que las pruebas las tendremos que pasar, que nuestra fe será probada por el fuego, (Isaías 43:2), que el seguirlo a Jesucristo es andar como Él anduvo, pensar como Él piensa, pués tenemos la mente de Cristo. Hoy te dicen que tenés que proclamar y decretar sanidad, riqueza, y Dios te va a sanar y enriquecer porqué sos Su hijo, qué de los hermanos que no reciben nada de eso, estarán en pecado? De una cosa si nos olvidamos, si somos hijos de Dios, Él es nuestro dueño, y como el sabio Dios, sabe lo que nos conviene, si nos quiere llevar antes, sabe porqué lo hace y si quiere que vivamos con lo justo, quiere que tengamos "sustento y abrigo" y estemos contentos con esto.
El Señor anhela que podamos presentarnos delante de Él santos y sin mancha, y que el Señor Jesucristo pueda decir al Padre, "de los que me diste, ninguno se perdió".
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